jueves, 27 de octubre de 2011

El fenómeno de los sueños sólidos



Por: Marisol Roldán

    El misterioso mundo de los sueños se nos abarca increíble de entender en nuestra
realidad consciente. Nuestras mentes se dejan dominar por ciclos variados durante el proceso de sueño que nos permiten descansar el organismo, la mente y tal vez nuestra existencia diariamente. ay muchos estudios variados sobre los sueños. Todos los mamíferos tienen la capacidad de soñar, y aunque no sepamos a que se debe, como todo en la creación debe de tener un sentido práctico y otro más indefinido.

    Del mundo onírico se han encargado muchos autores, cada cual intentando desentrañar su enigma, su simbología o sus particularidades psíquicas. Hay quienes incluso han intentado enseñar a usar los sueños para darnos voluntad a nuestra vida, orientándolos con lucidez, de tal forma que motive nuestra voluntad interna y sirva tanto como terapia como para despertar psicoanímico. Pero la ciencia que intenta descubrir su fórmula y aplicación hasta ahora sólo a logrado determinar que existen unas fases durante las cuales el cerebro va cambiando de estado eléctrico, y que muchas veces terapias basadas en la modulación organizada de estas fases son buenas aliadas en ciertas dolencias de carácter psicosocial.

    La parte esotérica se ha encaminado a usarlo de manera practica, basándose en la idea chamánica de que los sueños son un mundo alternativo al que despertamos una vez hemos cerrado el consciente que nos limita a usar los cinco sentidos. Si logramos acceder a esa realidad controlando nuestro viaje por ella habremos conseguido sueños lucidos pregonados por el Maestro Juan Matus de Carlos Castaneda. Pero también la observación esotérica , desde hace milenios, ha intentado descubrir sus secretos, intuyendo que las imágenes y demás contenidos de un sueño permiten al soñante conocer cosas de si mismo o del mundo que le rodea, incluso ver pasado o intuir futuro.

    Durante el sueño estamos “desconectados al exterior físico”, a modo de vida latente donde nos funcionan meramente los procesos autónomos que no requieren del control de la volunta o consciencia, la mayoría de ellos metabólicos. Lo que sucede en nuestra mente y dentro de ella en los sueños nos escapa del control, pero sigue siendo un algo inmaterial que nos puede afectar o no, pero sólo emocionalmente. O al menos eso es lo que creíamos antes de escuchar algunos testimonios de sueños sólidos.

    José Antonio y yo, acuñamos el término “sueños sólido” para definir a aquellos sueños que abruman por su realismo al soñador, de tal manera que es consciente de ellos y tiene activos dentro de la ensoñación sus sentidos físicos, más los intuitivos o sensitivos. De tal modo que dan una impactante realidad a la vivencia que tenemos durante el sueño. Pero esto sucede en muchas ocasiones  sin que sea propiamente un sueño sólido, o que simplemente se trate de un viaje astral. Cuando hablamos de sueños sólidos en está ocasión nos vamos a referir a aquellos que dejan constancias físicas, después de haber despertado.

    Personas que sueñan con accidentes y al despertarse constatan hematomas e incluso fracturas de miembros. O que para su sorpresa oyen como un familiar suyo les indican que han encontrado un guiso hecho a  cientos de kilómetros de distancia al levantarse, sin que ninguno en la casa hubiera puesto la olla....exactamente lo que ella había soñado que estaba haciendo en casa de ese familiar.

    Una cosa es ver o adivinar en sueños, como si realizáramos un viaje inconsciente a un lugar remoto y que podría explicarse por alguna formula de experiencia extracorporal o intuición telepática si se descubriera que más que ir allí hemos conectado con la mente de los que estaban en ese lugar.

    Con estas líneas a modo de resumen os mostramos la línea a seguir de nuestro estudio, del que requerimos tu siempre apreciable ayuda para encontrar testimonios y pruebas de la existencia real de los sueños sólidos. Envíanos tu experiencia a aluzmisterios@gmail.com o en los comentarios del blog

No hay comentarios:

Publicar un comentario